La Mamaliga es un querido plato rumano, a menudo conocido como "polenta rumana". Es una sencilla pero sustanciosa papilla de harina de maíz que sirve como acompañamiento versátil o incluso como plato principal cuando se combina con diversos ingredientes. Ya sea que la disfrutes con crema agria, queso o un delicioso estofado, la Mamaliga es una comida reconfortante que calienta el corazón.
Resumen de la receta
Preparación
30 min
Porciones
4
Dificultad
Fácil
Ingredientes
Instrucciones
1
Paso 1
En una olla grande, lleva el agua a hervir. Agrega la sal.
2
Paso 2
Espolvorea gradualmente la harina de maíz en el agua hirviendo mientras revuelves constantemente para evitar grumos.
3
Paso 3
Reduce el fuego a bajo y continúa revolviendo la mezcla con una cuchara de madera o espátula. La mamaliga comenzará a espesar a medida que se cocina.
4
Paso 4
Cocina la mamaliga durante unos 20-30 minutos, revolviendo regularmente, hasta que alcance una consistencia espesa similar a la de la avena.
5
Paso 5
Si lo deseas, agrega la mantequilla para darle sabor y cremosidad adicionales.
6
Paso 6
Una vez hecho, retira la olla del fuego y deja reposar durante unos minutos.
7
Paso 7
Sirve la mamaliga caliente, ya sea como acompañamiento o como base para toppings. Se suele disfrutar con queso rallado, crema agria o como acompañamiento de guisos y salchichas.
Consejos para la receta
Aquí tienes algunos consejos útiles para preparar perfectamente Mamaliga y obtener los mejores resultados.
Utiliza siempre ingredientes frescos para obtener el mejor sabor
Prepara todos los ingredientes antes de comenzar a cocinar
Controla la temperatura durante la cocción para evitar que se queme
Preguntas frecuentes
Esta receta tiene una dificultad Fácil, lo que significa que es accesible para cocineros de todos los niveles.
El tiempo de preparación es de 30 minutos y el tiempo de cocción es de minutos.
Esta receta está diseñada para 4 porciones.
Sí, muchos ingredientes se pueden sustituir por alternativas similares. Te recomendamos consultar las variaciones de la receta.
Guarda la preparación en el refrigerador por hasta 3 días en un recipiente hermético. Algunas preparaciones se pueden congelar por hasta 3 meses.