4 guindillas secas de tipo cayena sin trocear (o 2 si se trocean)
400 g tomate tamizado
1 latita anchoas en aceite de oliva (de unos 30 g en peso escurrido)
80 g alcaparras encurtidas (peso ya escurrido)
100 g aceitunas negras sin hueso (peso ya escurrido)
400 g tomate tamizado
100 g queso parmesano (opcional)
Al gusto pimienta negra
Al gusto perejil picado
Al gusto orégano
Aceite de oliva
Acompáñame y veamos cómo hacer Spaghetti alla puttanesca
Instrucciones:
Paso 1
Filetear las aceitunas si no vienen ya así. Reservar.
Paso 2
Picar finamente los dientes de ajo
Paso 3
Calentar aceite en una cazuela
Paso 4
Incorporar a la cazuela el ajo picado y las guindillas enteras y saltear. Pongo las guindillas enteras porque luego las retiro. De este modo, el toque picante será muy ligero. Si nos gusta mucho el picante, se pueden trocear y no retirarlas, pero en ese caso probablemente se deberá usar menos cantidad (un par pueden ser suficientes).
Paso 5
Cuando el ajo se haya dorado muy ligeramente, añadir las anchoas y remover hasta que se deshagan. No hace falta escurrirlas.
Paso 6
Retirar las guindillas si hemos optado por dejarlas enteras
Paso 7
Añadir las aceitunas fileteadas y las alcaparras, todo bien escurrido. Remover y saltear brevemente.
Paso 8
Añadir el tomate tamizado, bajar el fuego e ir removiendo con cierta frecuencia
Paso 9
Mientras se cocina la salsa, hervir la pasta siguiendo las instrucciones del fabricante.
Paso 10
Cuando se haya terminado de cocinar la pasta, es el momento de añadir a la salsa la pimienta, el perejil y el orégano. Remover la salsa.
Paso 11
Típicamente, se añade la pasta escurrida a la cazuela y se le dan unas vueltas, aunque yo no suelo hacerlo porque acostumbro a preparar salsa para varios días y congelar la que no uso en el momento. En vez de mezclar la pasta y la salsa en la cazuela, añado la salsa sobre la pasta ya en el plato.
Paso 12
El queso parmesano es opcional. Se puede añadir a la salsa en la cazuela en el último momento y remover hasta que se deshaga o, más típicamente, servirlo aparte para que cada comensal se eche la cantidad que quiera (o pueda prescindir de él).