En una cacerola, combina la sémola, el azúcar y la leche. Cocina a fuego medio, revolviendo constantemente, hasta que espese y se convierta en una crema. Retira del fuego, agrega la mantequilla y deja enfriar.
Paso 2
Precalienta el horno a 350°F (175°C). Engrasa una fuente de horno.
Paso 3
Bate los huevos y el extracto de vainilla. Añádelos lentamente a la crema de sémola, mezclando bien.
Paso 4
Coloca la mitad de las hojas de filo en la fuente de horno, pincelando cada capa con mantequilla derretida.
Paso 5
Vierte la crema sobre las capas de filo.
Paso 6
Coloca el resto de las hojas de filo encima, pincelando cada capa con mantequilla.
Paso 7
Haz cortes en las capas superiores de filo en forma de cuadrados o triángulos.
Paso 8
Hornea durante 40-45 minutos o hasta que esté dorado.
Paso 9
Saca del horno, espolvorea con azúcar glas y decora con canela.
Paso 10
Sirve caliente y disfruta de tu Bougatsa casera.
Consejos para la receta
Aquí tienes algunos consejos útiles para preparar perfectamente Bougatsa y obtener los mejores resultados.
Utiliza siempre ingredientes frescos para obtener el mejor sabor
Prepara todos los ingredientes antes de comenzar a cocinar
Controla la temperatura durante la cocción para evitar que se queme
Variaciones de la receta
Prueba estas deliciosas variaciones de Bougatsa para darle un toque diferente a tu preparación.
Versión vegetariana: sustituye la carne por proteínas vegetales como tofu o legumbres
Versión picante: agrega chiles o especias picantes al gusto
Versión saludable: reduce el aceite y aumenta las verduras
Versión sin azúcar: utiliza endulzantes naturales como stevia o miel
Preguntas frecuentes
Esta receta tiene una dificultad Intermedio, lo que significa que es accesible para cocineros de todos los niveles.
El tiempo de preparación es de 60 minutos y el tiempo de cocción es de minutos.
Esta receta está diseñada para 8 porciones.
Sí, muchos ingredientes se pueden sustituir por alternativas similares. Te recomendamos consultar las variaciones de la receta.
Guarda la preparación en el refrigerador por hasta 3 días en un recipiente hermético. Algunas preparaciones se pueden congelar por hasta 3 meses.