Hacemos un sofrito con la cebolla, morrón y ajo, todo picado en cuadritos.
Paso 2
Mientras tanto, en una fuente agregamos el pan trozado y la leche para remojarlo y que se deshaga.
Paso 3
Picamos un poco los mariscos (yo usé mariscos congelados que ya venían cocidos) y los agregamos al sofrito. Salpimentar a gusto.
Paso 4
Luego agregamos el pan remojado con leche y la crema a los mariscos, revolvemos bien y cocinamos unos minutos más. Agregamos también un poco de queso rallado a gusto.
Paso 5
Vaciamos la mezcla en pocillos de greda o los que tengan que sean aptos para horno, y ponemos queso encima. (Me alcanzó para 3 pocillos bien contundentes).
Paso 6
Llevamos al horno precalentado, por unos 15 minutos o hasta que noten que el queso ya esté gratinado o doradito. Y listo a disfrutar .